Prevención de caídas

Muchas veces no valoramos nuestra habilidad de caminar. Pero, no nacimos sabiendo desempeñar esa capacidad. Caminar requiere mucha práctica. Reflexiona: pasa mucho tiempo antes de que un niño de 1 año empiece a caminar. Esta habilidad requiere coordinación precisa de los músculos y que el cerebro coordine las señales entrantes con mensajes salientes a los músculos apropiados para que puedan responder. Cualquier desglose en este proceso puede hacer que una persona pierda el equilibrio y se caiga. A medida que envejecemos, nuestros cuerpos cambian. Estos cambios aumentan nuestro riesgo de caídas. Por ejemplo, a medida que envejecemos, nuestros ojos pierden la habilidad de adaptarse fácilmente de la luz a la oscuridad- y de la oscuridad a la luz. Es más fácil caerse cuando caminas al baño durante la noche. Nuestros ojos también se vuelven más sensibles al resplandor. La visión periférica se hace más pequeña, y nuestra percepción cambia. Por ejemplo, podrí...