Consejos y herramientas para aceptar la enfermedad: para pacientes, familiares y personas y cuidadoras

 

Aceptar el diagnóstico de Alzheimer o de otra demencia no es un proceso sencillo. Tanto la persona afectada como su entorno atraviesan momentos de confusión, miedo, tristeza y, a menudo, negación. Sin embargo, existen herramientas y enfoques que pueden facilitar la comprensión y aceptación del nuevo escenario, y ayudar a transitar este camino con mayor serenidad y sentido.


1. Aceptar las emociones sin juzgarlas

Es normal sentir angustia, enojo o tristeza frente a un diagnóstico de demencia. No hay emociones “incorrectas”. Reconocerlas y expresarlas en un espacio seguro —con un psicólogo, un grupo de apoyo o en familia— permite dar el primer paso hacia la aceptación.

2. Informarse adecuadamente

La información precisa y confiable es fundamental. Entender en qué consiste la enfermedad, cuáles son sus etapas y qué se puede esperar, ayuda a reducir la ansiedad. Conectarse con asociaciones dedicadas a trabajar con familias y personas con demencias donde los profesionales puedan educar e informar, entendiendo el proceso por el que está pasando la persona con un diagnóstico y su familia. 

3. Involucrar a la persona diagnosticada en las decisiones

Siempre que sea posible, incluir al paciente en la toma de decisiones sobre su cuidado, tratamiento o rutina diaria es una forma de respetar su autonomía y dignidad. Esto también fortalece el vínculo con su entorno.

4. Establecer rutinas claras y adaptadas

Las personas con demencia se sienten más seguras cuando sus días tienen estructura. Las rutinas predecibles reducen la confusión y el estrés. Adaptarlas a las capacidades del paciente es clave, priorizando siempre la comodidad y la seguridad.

5. Buscar y aceptar ayuda

El rol del cuidador es fundamental, pero también exigente. Pedir ayuda —a otros familiares, a cuidadores profesionales o a servicios comunitarios— no es un signo de debilidad, sino una muestra de compromiso con el bienestar de todos los involucrados. También es vital que el cuidador cuide de sí mismo.

6. Cultivar momentos significativos

Aunque la memoria falle, las emociones permanecen. Compartir una canción, mirar fotos antiguas, dar un paseo juntos o simplemente sostener la mano de la persona enferma pueden ser actos profundamente reconfortantes. La conexión emocional no se pierde: se transforma.


Aceptar la enfermedad no significa resignarse, sino comprender que, aunque muchas cosas cambiarán, aún es posible vivir con dignidad, amor y sentido. Las demencias nos enfrentan al desafío de la pérdida, pero también nos invitan a una nueva forma de presencia y cuidado mutuo.


Referencias

  • Asociación Internacional de Alzheimer (Alzheimer’s Disease International). www.alzint.org

  • ALMA Asociación Lucha contra el Mal de Alzheimer y alteraciones semejantes. www.alma-alzheimer.org.ar

  • Mayo Clinic. Alzheimer’s Disease – Caregiver Tips. www.mayoclinic.org

  • National Institute on Aging (NIH – EE.UU). “Caring for a Person with Alzheimer’s Disease: Your Easy-to-Use Guide”.

  • Organización Mundial de la Salud. “Demencia: una prioridad de salud pública”.

Comentarios

Entradas populares de este blog

ROMPIENDO BARRERAS Y DEFENDIENDO LOS BENEFICIOS DE LA TERAPIA NO FARMACOLÓGICA

DÍA EUROPEO DE LA LOGOPEDÍA. AFASIA

TARJETA [+CUIDADO]